Y hablo en presente, porqué ya es una realidad.
No podemos obviar la realidad, las ventas siempre han sido una cuestión de números.
Haz la prueba.
Es cuestión de tiempo, pero alguna venta caerá. Es más, cuantas más llamadas haga, más ventas hará debido al aprendizaje continuo (machine learning en inglés**)**. El venededor novato sabrá qué objeciones presentan los prospectos y cuales son sus respuestas ganadoras.
Y amigos, la inteligencia artificial (IA) tendrá un gran impacto en el mundo de las ventas, lo queramos o no. Nos cueste más o menos aceptarlo.
Sus usos son múltiples, y atento, que no son pocos.
Se puede utilizar para automatizar tareas repetitivas como la entrada de datos y la generación de clientes potenciales, lo que libera a los vendedores para que se centren en actividades de mayor valor, como establecer relaciones personales, investigar las necesidades de un sector concreto y cerrar reuniones.
La IA también se puede usar para analizar grandes cantidades de datos, como las interacciones de los clientes y los patrones de compra, para identificar tendencias y conocimientos que puedan nutrir y mejorar la estrategia de ventas de tu equipo comercial.
¿Te imaginas un análisis en tiempo real del mercado de consumo basado en millones de datos extraídos de Google?
Una locura.
De hecho, hoy día ya existen muchas páginas web que están utilizando chatbots y asistentes virtuales con tecnología basada en la inteligencia artificial. Se utilizan para interactuar con los clientes y ofrecer recomendaciones personalizadas, mejorando la experiencia del cliente.
Y por supuesto, liberando a los humanos de responder a muchos mensajes repetitivos.
Quizá la mejor opción sería ver la IA como un aliado, no como el enemigo.
Lo veremos, pero es muy probable que la IA mejore la eficiencia y la eficacia de los equipos de ventas. Mejores datos nos proporciona mejores argumentos de ventas, y por lo tanto, mejores textos y más presuasivos. Si lo combinamos con un copywriting de calidad, los resultados pueden ser extraodinarios.
Pero vamos al grano.
Estos son algunos ejemplos prácticos de cómo se puede usar la IA para mejorar las ventas:
En general, la IA tiene el potencial de mejorar en gran medida la eficiencia y la eficacia de los equipos de ventas, lo que les permite dirigirse y atender mejor a los clientes. Al automatizar tareas repetitivas, proporcionar información a través del análisis de datos, personalizar interacciones y optimizar el proceso de ventas, la IA puede ayudar a las empresas a aumentar sus ventas e ingresos.